31.12.08

13 campanadas

Este año (no es el único) tendremos un segundito de vida más extra por la gracia de las transiciones atómicas y la rotación de la tierra.
Desde 1972 se viene añadiendo un segundo denominado segundo intercalar cada cierto número de años para corregir la diferencia entre el tiempo medido con los relojes atómico y el tiempo medido astronómicamente (con la rotación de la tierra). El primero se basa en oscilaciones de átomos que marcan una frecuencia a partir de la cual se define el segundo. El segundo se basa en la rotación terrestre, que define el día y por ende el segundo.
Ambas medidas presentan una discrepancia debido fundamentalmente a que la rotaicón terrestre no es un proceso exacto, es decir, no dura siempre lo mismo. Para que el tiempo de los relojes atómico coincida con el tiempo astronómico, que es con el que estamos familiarizados, se ha decidido introducir este seguno, como se podría haber decidido hacer otra cosa (quizás ésta sea la solución menos problemática)
Por cierto, en España y casi toda Europa, esto ocurrirá de las 00:59:59 a las 01:00:00 de la madrugada del 1 de enero de 2009, recordad que estamos en UTC+1.
Bien explicado lo tendréis en otro montón de sitio (mi niña pequeña de tres meses no me deja más tiempo), pero uno es el blog de Javier Armentia "Por la boca muere el pez".
Feliz 2009.

Dale a Bush

No me he podido resistir a comentar este enlace que me he encontrado en la web. Se trata de un simple juego que consiste en tirarle zapatos a Bush. Ha sido inventado por un chaval de 24 años que por lo visto se ha hecho rico vendiendo píxeles de su página de bienvenidad a internet (desde luego es que soy tonto, mira que trabajar para ganar dinero), llamada "la página del millón de dólares". El juego está chachondo, se llama "sock & awe". A ver quien se resiste a tirarle un mocasín al energúmeno ese.

28.12.08

El LHC tardará un poquito más



La avería del LHC va para largo, más de lo que se pensaba inicialmente. En concreto, se ha producido un fenómeno muy poco probable denominado quench. Éste consiste en una pérdida de la propiedad de superconductividad de los conductores. Al perder esta característica aparece una resistencia que da lugar a una pérdida de calor por efecto Joule. Cuando esto ocurre en unos electroimanes como los del colisionador, que almacenan unas cantidades tan enormes de energía, la pérdida de calor es de tal magnitud que las conexiones internas de los imanes se vaporizan y desaparecen. Además el helio líquido que se utiliza como refrigerante (tan solo a unos 2 y pico grados por encima del cero absoluto) empieza a ebullir. Esto produce una acumulación de gas y un aumento de presión que acaba provocando una fuga (como una olla exprés). La pérdida de helio ha sido según parece de unas 6 toneladas, que se dice pronto. Junto a este problema se añade que una liberación de energía de este calibre provoca un desplazamiento de los electroimanes, que ha llegado a ser de unos 50 cm (¡un "mueble" de unas 30 toneladas desplazado esa distancia!, como para haber estado allí en medio).




La reparación parece que va a ser complicada. Se han producido roturas en las bases de soporte de los imanes y además hay que subirlos a la superficie para arreglarlos (están a unos 100 metros de profundidad), a parte que hay que esperar a que los imanes se calienten y luego volver a enfriarlos (algunos meses). El coste sobre todo va a ser de tiempo, ya que parece haber materiales de repuesto, y esto implica dinero, pues hay que pagar al personal. Lamentablemente empieza a requerir más dinero, pero era de esperar que ocurrieran algunas contingencias, que nadie empiece a protestar.



A partir de esto se ha tenido que replantar la situación y existen dos planes de actuación actualmente, a los que denominan plan A y plan B (para que complicarse la vida).

El plan A es el más probable y consiste en utilizar el LHC parcialmente, es decir, no habra super colisiones, solo actividad dirigida a la puesa a punto del sistema y de los experimentos. Por lo tanto comenzará a haber resultados para finales del verano de 2009.

El plan B consiste en esperar a tenerlo todo listo para las super colisiones, lo que implica más tiempo y en consecuencia habrá que esperar a 2010.

En cualquier caso merece la pena esperar, estamos ante el que quizás sea el mayor acontecimiento en la ciencia hasta ahora.

Como siempre toda esta información, mejor contada, la podeis encontrar en el blog de la Hora Cero y en la Homepage del LHC.